¿Qué hacer en el Cervantino?

Por desgracia en México, la mayoría de la gente relativamente joven escucha “Guanajuato”, y la primer palabra que se les viene a la mente es “Cervantino”... y con ello borracheras, parrandas y excesos. Sin embargo, ¿qué se hace en realidad en el Festival Internacional Cervantino?
Tiene poco más de un año que estoy viviendo en esta hermosa ciudad llena de colores, callejones y túneles, y este es el segundo año que vivo el Festival Cervantino “desde adentro”.
Por ello, esta entrada no será de la publicidad sobre las más de 900 actividades culturales que se llevarán a cabo por casi un mes, porque para ello pueden informarse en la página http://www.festivalcervantino.gob.mx. De hecho este año están España y Jalisco como invitados.
Sin embargo, antes de entrar al tema, algo que vale la pena mencionar y que yo no sabía, sino porque el domingo estaba escuchando el radio, donde entrevistaron a uno de los organizadores del Cervantino, me enteré que el escritor Ignacio Padilla era parte de los organizadores del Festival de este año, y digo era porque desgraciadamente falleció el pasado mes de agosto. Originalmente se había planeado que diera una charla este 7 de octubre, pero en su lugar se le hará un merecido homenaje con el director del museo Iconográfico del Quijote y amigos invitados.
En fin, en primer lugar, tengo que reconocer que el Cervantino es el ingreso económico más importante del municipio. Y es que literalmente se llena de turistas de todos lados, nacionales y extranjeros, los hostales y hoteles están hasta su máxima capacidad y me ha tocado ver grupos de chavitos que se duermen sentados en la banqueta, entrelazados de los brazos.
Una de mis amigas vive justo en el corazón de Guanajuato. Y, a dicho de ella, el Cervantino no es el evento más esperado por ella y su familia jaja porque más allá de estar en una zona privilegiada -la mayoría mataríamos por vivir en donde ella vive-, realmente resulta engorroso acceder a su casa en el mes de octubre. Digo, tal vez está padre para cuando planeas antrear, barear o agarrar la jarra porque los principales lugares le quedan bastante cerca, pero ello implica que en este mes sobre todo, tenga que lidiar con borrachos mala copa casi todos los días. Y más aun, con el cierre de vialidades, gente por todos lados, en fin, Guanajuato es un caos cuando llega el Cervantino.
Ayer martes, por ejemplo, salí con mi sobrino y me tocó probar el mezcal de alacrán. Después nos invitaron a un “antro”, pero bueno, yo pensaba que ni gente habría porque pues era martes, pero para mi sorpresa el lugar estaba tan lleno que parecía viernes, de quincena, con promoción al 2 x 1, no cover y con barra libre… así la cosa… entiendo que muchos chavos sobre todo, vienen solo a eso, a hacer de Guanajuato la cantina más grande del mundo, pero créanme que tampoco está padre.
Lo que es cierto es que los precios suben cuando es Cervantino, vaya, hasta los famosos Dorilocos valen 3 pesos más. Y pensándolo bien, habría que checar eso con la Profeco jaja.
El problema en el Cervantino son los destinatarios. Y no, no me refiero a que deben dejar de venir, al contrario, solo se trata de usos y costumbres, la mayoría de turistas jóvenes, no toman consciencia de las actividades culturales, sino que se esfuerzan por beber hasta perder la razón, pasando como un remolino, generando estragos en todos lados, haciendo el ridículo la mayoría de las veces y orinándose en las calles, pensando que lo que pasa en Guanajuato, se queda en Guanajuato.
Los gobiernos municipal y estatal trabajan en coordinación para atender situaciones irregulares, implementan operativos como el alcoholímetro, y hacen al menos lo que está en sus manos. Se trata de que los turistas tomen consciencia, Guanajuato es para ustedes, cuídenlo y cuídense.
La gente local –al menos la que yo conozco-, es consciente y responsable con el consumo de alcohol.  De hecho, los domingos no venden alcohol después de las tres de la tarde.

Guanajuato ofrece una enorme gama de lugares para conocer, y si a eso le suman los eventos culturales, les aseguro que podrían gastar menos y disfrutar más. Yo les recomiendo que no dejen de venir a visitarnos, Guanajuato es bello todos los días del año y su gente lo mismo, no solo en el Cervantino. 

Nora


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